Biografías


Reverendo
Ignacio Gómez

Por Bibiana Hernández Suárez
 


Existen actualmente cinco iglesias en el barrio de Puerta de Tierra. Entre éstas, la Primera Iglesia Bautista de Puerta de Tierra cuenta con un dato muy particular en su historia, que es también la historia de nuestra comunidad. Este hecho singular de la Iglesia Bautista lo es Ignacio Gómez, el pastor que por más años ha ministrado en Puerta de Tierra, ya que cumple treinta años en el pastorado de la Iglesia Bautista el 7 de enero del próximo año 2019. 

Es fácil decirlo, pero tal trayectoria es muy significativa, principalmente por todas aquellas experiencias en el Señor Jesucristo que ha podido vivir el pastor, y también porque este siervo de Dios ha estado ligado al sentir y quehacer de Puerta de Tierra como pocos líderes religiosos lo han estado a través de todos estos años. 

Ignacio Melbi Gómez Elibo nació en la República Dominicana el 18 de septiembre de 1951. Fueron sus padres el comerciante Ignacio Gómez Germán, natural de la República Dominicana, y la enfermera graduada María Socorro Elibo Kingsley, natural de Jacksonville, Florida. Por su familia materna, el pastor Gómez tiene raíces irlandesas y africanas, y por su familia paterna tiene raíces sefarditas, es decir, judías españolas. Cursó estudios en contabilidad y auditoría en la Universidad Autónoma y estudió Medicina en la Universidad Central del Este, ambas en Santo Domingo. Posteriormente el pastor Gómez viajó a Nueva York, donde estudió programación de computadoras en el PSI, y también Inglés como segunda lengua en el SCS.
 
En 1988 el pastor se trasladó a Puerto Rico en viaje de vacaciones y comenzó a asistir a la Iglesia Bautista de nuestra comunidad. Al pasar el tiempo la congregación escogió al entonces Hno. Ignacio para ocupar el puesto de Presidente de la Junta de líderes de la iglesia, lo cual realizó con mucha satisfacción y amor espiritual. Luego la misma congregación también le pidió que ocupara el puesto de pastor de la iglesia. Después de aprobar los exámenes PAEG de la Universidad de Princeton, N. J. para la admisión a estudios graduados, el pastor entró al proceso preministerial, y luego fue instalado como pastor certificado, y continúa laborando al servicio de Dios hasta hoy, con la humilde esperanza que siempre lo ha caracterizado. 

Sus feligreses le aman porque así él se lo ha ganado. Irma Camacho y Carmen Avilés, dos hermanas en la fe, afirman que: “El pastor es un alma de Dios. No tiene nada suyo. Y a la hora que sea en que se le necesite, está dispuesto a ayudar, a visitar, a predicar y, sobre todo, a escuchar. No hace distinciones entre las personas que soliciten su presencia o su consejo. Era un profesional exitoso y sin embargo un día lo dejó todo por obedecer al Señor, y aún por encima de sus múltiples condiciones de salud, sigue trabajando para la obra de Dios.” Y el mismo pastor a su vez nos indica que: “Mi fe en la obra evangelizadora de la Palabra de Dios es un llamado, y es una inquietud y un amor que se desarrollan por las almas.” Y en cuanto a dedicar la mitad de su vida a pastorear en nuestro barrio, el pastor expresa: “Vi una gran necesidad de acercar las almas al Señor porque vi muchos corazones llenos de gran nobleza, pero con ausencia de Dios.” Por esta y otras muchas razones Puerta de Tierra tiene en el pastor Gómez y en la Iglesia Bautista una puerta abierta a la esperanza y la salvación para cada vida, y para todos sus habitantes.